jueves, 24 de marzo de 2016

PESADILLA

Si al caerme de la cama conectara directamente mi cerebro y corazón con el papel no se que mounstruos saldrían a jugar con la tinta.
Mi debida precaución parece dejarme en una niebla adormilada que deja a los fantasmas lejanos, intangibles, difíciles de materializar en las palabras.
Pero están ahí, pendientes de que vuelva el sueño y volar libres en el absurdo mundo de imágenes y sensaciones sin censura que despierta cuando duermo.
Están ahí, pendientes de que cierre los ojos, relaje mi cuerpo y me libere de las ataduras que impone mi consciencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario